Hoy hace una semana que tuvimos la suerte de estar presentes durante uno de aquellos momentos maravillosos que te dejan con una sonrisa en la boca y que no se te borra ni viendo el telediario. Si unimos buena compañía, con una sala coqueta y acogedora, y unos monstruos dándolo todo encima del escenario, ¿que nos queda? "Magia" es la respuesta.
Visión Sonora fueron el envoltorio de regalo para una velada inolvidable vivida en la bella localidad costera de Sant Carles de la Ràpita (puerta del Delta del Ebro). Barriendo para casa aprovecho para recordar que recientemente las Terres de l'Ebre, en las cuales se ubica el Delta, han sido declaradas por la UNESCO "Reserva de la Biosfera".
Antes de empezar el concierto tuve el honor y el placer de poder departir amigablemente con Mon Dominguez (voz de la banda) y Celeste González (web Planeta Indie), derivando hacia una entrañable tertulia, intentando durante la misma solucionar los problemas actuales del panorama musical, social, económico... me temo que finalmente sin mucho éxito, dicho sea de paso.
Visión Sonora fueron el envoltorio de regalo para una velada inolvidable vivida en la bella localidad costera de Sant Carles de la Ràpita (puerta del Delta del Ebro). Barriendo para casa aprovecho para recordar que recientemente las Terres de l'Ebre, en las cuales se ubica el Delta, han sido declaradas por la UNESCO "Reserva de la Biosfera".
La sala Passarel.la fue testimonio de un directo donde Visión Sonora, además de exhibir su flamante disco Oxígeno, nos ofreció nuevas canciones (Hippies de Plástico por ejemplo, con su vídeo a final de post) y hasta una increíble versión mix del Strawberry fields forever de los The Beatles, más psicodélica si cabe que la original y la cual aplaudimos hasta salirnos los primeros callos.
En concierto la banda suena mucho más enérgica que en el disco, con momentos donde Ismael Cadena a la batería parecía que hundía el escenario con su hábil arroje. Mientras, Manuel Vargas a la guitarra nos deslumbraba con sus solos y distorsiones, Manolo León con sus notas a los teclados y Cliff Houtkoop, porte imperturbable incluido, martillaba su bajo erigiéndose en el latir de los oscenses. De Mon, que decir, con esa voz tan peculiar que te pone el bello como escarpias, desplegando poderío, sabiendo ganarse la complicidad del respetable con su actitud y carisma.
En concierto la banda suena mucho más enérgica que en el disco, con momentos donde Ismael Cadena a la batería parecía que hundía el escenario con su hábil arroje. Mientras, Manuel Vargas a la guitarra nos deslumbraba con sus solos y distorsiones, Manolo León con sus notas a los teclados y Cliff Houtkoop, porte imperturbable incluido, martillaba su bajo erigiéndose en el latir de los oscenses. De Mon, que decir, con esa voz tan peculiar que te pone el bello como escarpias, desplegando poderío, sabiendo ganarse la complicidad del respetable con su actitud y carisma.
Sólo nos queda contar los días hasta una próxima ocasión de poder volver a disfrutar de este magnífico espectáculo que es un concierto de Visión Sonora y poder gritar a grito pelao aquello de: ¡otra, otra, otra...!
Muy buena crónica y queremos a este grupo ya en Valencia!!!!
ResponderEliminarGenial, precioso artículo, saludos.
ResponderEliminarGracias por vuestras palabras, ciertamente fue un acontecimiento donde nos lo pasamos en grande. Un abrazo!
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