GREMIO DC, la banda alicantina que
revolucionó en 2009 el panorama musical nacional con el álbum Conexiones
Mágicas, publicó a principios de 2013 su último trabajo Vista
Futura. Tras unos meses de su lanzamiento queremos arrancar en 2014
quitándonos la espinita de no haber reseñado este fantástico álbum en 2013.
Antes de adentrarnos en Vista
Futura, os recordamos que Conexiones Mágicas fue el primer
álbum (tercero de su carrera) que dio a luz con la financiación previa de cientos de “inversores” que apostaron por la banda. Lo que hoy conocemos como Crowdfunding,
pues bien, ellos fueron los primeros en recolectar la friolera de 50.000 dólares para poder sacar al mercado 5.000 copias, evidentemente con la seguridad de estar
ya vendidas.
Tras el lanzamiento
lograron vender cerca de 9.000 copias en 6 países, que en los tiempos que corren es todo un lujo, así que ¿quién va a discutir
la calidad de la banda? Por cierto ellos son Arturo López (guitarra, piano y sintetizadores), Javi
López (percusión), Alfonso Espinosa (Batería), Jose
Ángel Miralles (guitarra y sintetizadores) y Juanma Fabregat (voz y bajo), gran voz sin dudas.
Vista Futura (2013) es el cuarto álbum de la banda y en el que aparece el nombre de Raúl
de Lara y en consecuencia, calidad y buen sonido. El productor murciano
tomó las riendas de la grabación en su estudio La Sala de Máquinas a finales del 2012,
buena elección. El álbum, el más maduro y personal dicen de su carrera, nos muestra su
vertiente más electrónica, un giro significativo a su sonido donde los sintetizadores se llevan el papel principal
sin descuidar sus raíces más guitarreras, ni renunciar al hálito de Conexiones Mágicas.
El disco que incluye diez
temas, abre con “Al verme” y “Stop”, primer y segundo single respectivamente.
Dos temazos para arrancar que nos rebelan ya el potencial del grupo, clips incluidos dirigidos ambos por Fran Gas, otro conocido
de la escena murciana del que nos confesamos fieles admiradores.
En “Stop” ya en el segundo 17 estamos botando con un estribillo muy power pop-electrónico. Curioso que este estilo que prevalece en todo el trabajo sea una mezcla de influencias que van desde ritmos ochenteros hasta el indie electrónico más actual, y eso sea al mismo tiempo lo que plasme su mejor capital, esa fusión consigue un sonido muy particular que sigue sorprendiendo cuando parece que todo está ya inventado, y decimos sólo “parece”, afortunadamente la música es infinita.
En “Stop” ya en el segundo 17 estamos botando con un estribillo muy power pop-electrónico. Curioso que este estilo que prevalece en todo el trabajo sea una mezcla de influencias que van desde ritmos ochenteros hasta el indie electrónico más actual, y eso sea al mismo tiempo lo que plasme su mejor capital, esa fusión consigue un sonido muy particular que sigue sorprendiendo cuando parece que todo está ya inventado, y decimos sólo “parece”, afortunadamente la música es infinita.
Seguimos moviéndonos con temas como “En tu pasado” y “Toda la verdad” donde se deja entrever la presión que nos ejercen las redes sociales en determinados momentos.
Con un suave inicio y marcadas variaciones rítmicas encontramos “Conversos” que termina llevándonos hacía un enérgico estribillo que hace que sea una de nuestras favoritas. En el ecuador del trabajo aparece “Sumergido”, un medio tiempo que aminora la velocidad del viaje para dejarnos llevar por una melodía más épica e inevitablemente coreable.
Con un suave inicio y marcadas variaciones rítmicas encontramos “Conversos” que termina llevándonos hacía un enérgico estribillo que hace que sea una de nuestras favoritas. En el ecuador del trabajo aparece “Sumergido”, un medio tiempo que aminora la velocidad del viaje para dejarnos llevar por una melodía más épica e inevitablemente coreable.
En “Vista futura”, tema que lleva el título del álbum,
en “Extraños” y en “Te invitaré a bailar” observamos bien ese talante
electrónico hermanado con ese guitarreo más destacado en sus anteriores
trabajos.
Vista Futura concluye con “Vértigo”, con ganas de
seguir escuchando más y ante todo, deseando disfrutar de uno de sus directos
pronto.
En definitiva, un álbum muy trabajado, maduro, híper-bailable, carne
de directo, con letras urbanas y relaciones casi imposibles, reales, en el que se han cuidado todos los detalles afinadamente con un proceso de mezcla y masterización final impecables. De hecho, los resultados
saltan a la vista con el debut inminente de la banda en cine al incluirse en dos bandas sonoras, la primera en el film “El faro, la otra dimensión” en la que la banda va a componer un tema nuevo específicamente para el film que dirigirá Alfredo
Navarro y protagonizará el extremeño Valentín Paredes, actor que ya
aparece en el clip de “Stop” junto Elena Rayos y la segunda en el cortometraje “The Game” que se
grabará próximamente en Nueva York bajo la dirección del estadounidense Ray
Hungría.
Termino con el atrevimiento de comparar Vista Futura no con otros álbumes, sino
con una canción, “Sildavia” de La Unión
(1984), la energía que desprendió este hitazo
en su momento (y lo sigue haciendo) es la que nos ha transmitido el último
álbum de los alicantinos. Un consejo, ¡disfrutarlos!
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