Los festivos en la capital se viven, y vaya si se viven,
sobre todo en el ámbito musical. La primavera se despedía de sus últimos días con
lluvia intermitente y, para celebrar que llegaba el verano (y que teníamos
nuevo rey, por qué no), nosotros lo hacíamos con un concierto de Las BuenasNoches. De hecho, nos quedó claro que los chicos del grupo se tomaban su
concierto como una celebración post-coronación del rey Felipe VI con cantidad de bromas durante todo el show.
Eso sí, aunque la ocasión real (no Real) era presentar Hoy ya es mañana, su nuevo disco, los componentes de Las Buenas Noches decidieron no dedicar el concierto a lo nuevo únicamente, porque tienen dos trabajos anteriores. Por si alguien no se había enterado, había que presentarlos en vivo, así que los chicos tocaron temas anteriores como "El fin del mundo" o "Todas las escopetas".
Cuando sonaban canciones nuevas, como "Mañana" o "Vigilia", las
caras lo decían todo: el nuevo trabajo gusta, igual que gustaban los temas
anteriores, capaces de enganchar a los que ya conocían al grupo y a los que
estaban allí por probar, por ver qué tal.
El concierto de Las Buenas Noches es para disfrutarlo, para
vivir algo nuevo. El público estaba tan encantado que se animaba a pedir temas.
Y el grupo, encantador, daba lo que le reclamaba el respetable en forma de tema
extra.
Banjos, un cuatro venezolano, charango, ukelele, un contrabajo
y una mandolina como instrumentos de esos que no acostumbramos a ver en los
directos que frecuentamos. Con un estilo folk que recuerda a unos Mumford and
Sons patrios, os recomendamos al grupo y su actuación. Todo un descubrimiento,
uno de esos conciertos a los que merece la pena ir.
Podéis escuchar y comprar Hoy ya es mañana:
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