El 26 de agosto de 2016 se confirmó el insólito y macabro hallazgo de 45 cerebros y un corazón enterrados durante ocho décadas en una fosa común de la Guerra Civil en Burgos. Así empezó la concepción del aclamado primer álbum de MARIA ARNAL I MARCEL BAGÉS, un ejercicio de memoria, de recuerdo y a la vez de cicatrización. El olvido se convierte en el peor enemigo de la reparación.
En 2021 el dúo vuelve a la carga con un nuevo trabajo conceptual. Si en 45 Cerebros y 1 Corazón (2017) se miraba hacia el pasado, yendo metafóricamente de la superficie hacia las entrañas de la tierra, esta vez con Clamor (Fina Estampa, 2021) sería, siguiendo con la alegoría, desarrollando la idea desde tierra firme hacia el espacio exterior. Y "la idea" consiste en, a partir de la separación sentimental de Maria como resorte, perseguir un nuevo amanecer, un nuevo mundo, resurgir de las cenizas, buscar la depuración, quizás con nuevo orden natural incluido. Un "clamor" por la salvación del planeta vestido con la característica reinterpretación del fandango que ya nos tiene acostumbrados Maria, más numerosos referentes galácticos y literarios en lo lírico, Marcel esta vez además inyectando texturas electrónicas a mansalva, experimentación a raudales y mucho tejido colaborativo: David Soler como productor y tercera pata de la banda, Jose Luis de Vicente a la dirección artística y las Tarta Relena, Kronos Quartet, Holly Herndon y Morphosis Ensemble participando activamente en varios pasajes del álbum.
Se empieza a percibir el "clamor" con "Milagro", el corte que estrena, más que un álbum, lo que viene a ser una experiencia sensorial. Cabalgando en una estrofa que es toda ella un in crescendo, sutil pero implacable. Hasta que rondando el segundo minuto se desmelena confirmando un hermoso tapiz de loops electrónicos, percusión y riffs guitarreros. La lírica es una invitación a la resiliencia con hermosos versos como: <<Que mi voz vuelva a mutar, después de tanta cosecha, y convertida en veloz flecha, atraviese esta pared. Y vuelva a mirad con sed qué principio abrió esta brecha. De las amarguras miel, las heridas en la piel se curan. Volver a empezar de nuevo aunque el viento sople de cara. Si hay tempestad habrá calma. Volver a sentir el mmm-mmm.>>
¿Bailamos? Con "Ventura" (videoclip insertado al final de la página) podrás o mejor dicho, deberás hacerlo. A modo de "danza de la lluvia" con la convicción de que el destino está en tus manos. Si crees, puedes: <<En la palma de mi mano tres surcos, son un sendero; el primero, vivir entero; el segundo, morir fiero; el tercero, decir quiero. Atreverse al deseo.>>
La sensual "Fiera de mí" con su susurrante e irresistible mantra: <<Caminito de perlas muerde muerde muérdeme el cuello.>> Récord de escuchas del álbum en Spotify y con diferencia, prueba de que resulta la más adictiva del conjunto. Es curioso que la canción se sujete sobre una frase abierta a interpretaciones pero que, junto a su susurrante ejecución, podría transmitir incluso carga erótica, a la vez se envuelva con tal carga de paisajes sonoros y poéticos, incluso contestatarios. Estamos ante un disco de MARIA ARNAL I MARCEL BAGÉS, poco más a añadir.
"Meteorit ferit" nos anima al cambio, a una metamorfosis purificadora: <<Busco una ombra d'esperança, vull un canvi de partitura, vull cantar una aliança, vull canviar la llei futura, ara tan tendra i abans tan dura. Perdo la meva armadura i l'abraço tan fort com puc com si fos la teva cintura. (Busco una sombra de esperanza, quiero un cambio de partitura, quiero cantar una alianza, quiero cambiar la ley futura, ahora tan tierna y antes tan dura. Pierdo mi armadura y el abrazo tan fuerte como puedo como si fuera tu cintura).>> Una especie de intro instrumental armada de loops y ecos varios que se van lanzando, presentando su melódica estrofa. Estribillo que se desdobla abocado a un etéreo puente que vuelve a enlazar con el mismo estribillo y un final con cierta simetría con su inicio, conformándose todo en él un corte maravilloso.
El “Cant de la Sibil.la” ("Canto de la Sibila" en castellano) es un drama litúrgico de melodía gregoriana y origen medieval que anuncia el Juicio Final en la Misa de Gallo de las iglesias de Mallorca y en la catedral de Alguer (Cerdeña). Está declarado por la UNESCO "Patrimonio Inmaterial de la Humanidad". La "sibila" es una profetisa del fin del mundo de la mitología clásica que se introdujo y adaptó al cristianismo gracias a la analogía que puede establecerse entre dicha profecía y el concepto bíblico del juicio final. MARIA ARNAL I MARCEL BAGÉS adaptan este canto al siglo XXI de la mano de la artista electrónica estadounidense Holly Herndon y su inteligencia artificial a las voces, junto a las de las humanas y a la vez celestiales, Tarta Relena. Un rebaño de cabras se constituye la base perfecta donde desplegar cuatro minutos que ponen literalmente la piel de gallina.